LA AGRICULTURA DEL AÑO 2000
DE AGRICULTORES A MOLECULTORES
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Si bien es muy difícil precisar el modo en que se desarrollará la actividad agrícola en el próximo milenio, hay un a serie de cambios que indican las tendencias posibles.
Ellas están enmarcadas por un uso cada vez mayoritario de ciertos indicadores como:
- La robótica aplicada al agro.
- La informática.
- La bioingeniería molecular vegetal.
- Las comunicaciones.
- El ahorro de energía.
- La demanda de proteínas y otros productos específicos.
Muchas de las operaciones diarias en la agricultura son rutinarias, éstas pueden realizarse con facilidad y con gran seguridad y eficiencia por medio de ordenadores o robots programados; pueden colocarse en lugares fijos, como la automatización de riego, indicando turnos, caudales, direcciones, interrupciones o cortes programados, etc.; o bien móviles en tractores, cosechadoras y otras maquinarias agrícolas.
El apoyo de la informática aplicada al agro acelerará el análisis, la comprensión y el mejor uso de recursos e insumos, se podrá disponer de un detalle en "tiempo real" de lo que va ocurriendo en la preparación del suelo y su relación con la fertilidad y topografía del mismo o lo que ocurre en las cosechas también en tiempo real.
El uso combinado de sensores en todas las operaciones de maquinarias, evitarán accidentes, harán el trabajo más exacto y placentero y además enviando señales a satélites se podrá operar con más precisión de lo que hoy se lo hace a los sistemas de posicionamiento global (GPS).
La transformación de los vegetales por medio de la biotecnología es apasionante ya que los mismos podrán usar más eficientemente los fertilizantes, podrán producir en condiciones más extremas se suelos y climas, resistirán mejor el ataque de plagas y enfermedades y darán cosechas con estandars de calidad preestablecidos.
Las comunicaciones, inmensamente mejoradas por el uso intensivo de satélites, darán mejores pronósticos de cosechas y mejor información para las transacciones mundiales de alimentos.
Lo más importante de todo esto es que, en apariencia, se logrará producir con un mejor uso de la energía aplicada a los sistemas agrícolas y con una paulatina y creciente descontaminación del ambiente debido a que se preve un uso más ajustado de insumos.
Todo esto llevaría a una profunda transformación de todo el sistema; que actualmente es agrícola por un lado y alimentario por el otro, para transformarlo en SISTEMA AGROALIMENTARIO; esto también provocaría un cambio de sus actores, los AGRICULTORES. En efecto, los agricultores se transformarán en MOLECULTORES, ellos son los futuros productores de moléculas específicas que les demandará la Agroindustria. Ya no se hablará de demanda de trigo, maíz, soja u otros alimentos sino que la misma, esa demanda se transformará en demanda de proteínas, hidratos de carbono, aceites esenciales, concentrados solubles, etc.
En definitiva las moléculas específicas que la Agroindustria necesitará para su funcionamiento.
El mercado mundial cambiará, la alimentación cambiará, y ese será el nuevo escenario al cual debemos prepararnos para competir.
por Ing. Agr. Luis E. Vicini
Jefe de la A.E.R. - Bda. del Río Salí del INTA - Tucumán
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