Revista Producción
PRODUCCION Agroindustrial del NOA


OBJETIVOS PARA CEDER EL AGUA TUCUMANA
A ZONAS ARIDAS DEL NOA

Mejorará la calidad de vida en un área estimada en un 1.500.000 hectáreas. Una adecuada planificación de la ocupación territorial requiere contar con agua suficiente.
Es tan dramática la escasez de agua que hay sectores que no cubren el 25% de la dotación mínima, según la OMS.


Basta una rápida recorrida por el NOA para descubrir el contraste climático e hidrológico existente.
La abundancia hídrica en la selva tucumana y las características de aridez o semiaridez en el resto de la región. La actividad humana asociada directamente a la presencia del agua, se concentra en los sectores donde las lluvias son abundantes. Una adecuada planificación de la ocupación territorial requiere, como paso previo, contar con agua suficiente para satisfacer las necesidades del desarrollo, derivándola desde los sectores donde abunda hacia los sectores deficitarios.
Por ello surge la idea de estudiar y llevar a cabo un sistema de obras que tienda a equilibrar la disponibilidad hídrica natural de la región, derivando agua desde los tributarios del río Salí-Dulce hacia el sur, con la finalidad de abastecer a centros poblados, al ganado, y permitir el riego de una vasta región que se extiende desde el sur de Tucumán, el oeste de Santiago del Estero, el sudeste de Catamarca, el noroeste de Córdoba y llega hasta la provincia de La Rioja, lográndose el aprovechamiento integral de una fracción de las aguas de la cuenca del río Salí. Si bien esa fracción es de aproximadamente el 8% del caudal medio disponible, significa la posibilidad de superar la actual situación de marginación de los sectores áridos y semiáridos de la región.

ANTECEDENTES

El primer antecedente del proyecto del Canal Federal se remonta a la idea original del ingeniero Michaud, en la década del '30, de proveer del recurso hídrico al denominado "sediento oeste santiagueño". Luego, La Rioja, a través de la Dirección Genral de Obras Hidráulicas elabora el primer esquema del Canal Federal.
En 1988 los gobernadores de Córdoba, Catamarca, Santiago, Tucumán y La Rioja firman un Acta Intención creando el SIF (Sistema Interprovincial Federal) y se firma un convenio con el PEN por el cual se encarga al Consejo Federal de Inversiones (CIF) la ejecución de estudios y proyectos.
En 1990 se firma un convenio de cooperación entre el CIF y Agua y Energía Eléctrica a fin de realizar el proyecto. Agua y Energía concluye sus estudios en 1992, determinando que, a través de un sistema combinado de pozos y galerías filtrantes, se podrían captar entre 2,5 y 15 m3/s de agua subsuperficial.
El objetivo del Canal Federal es mejorar la calidad de vida de la población de la región en un área del orden de 1.500.000 has. con el suministro de 18 mil m3/día de agua potable para unos 162 mil habitantes (proyección año 2050); suministro de agua para el riego de unas 45 mil ha con tecnologías de aplicación moderna; suministro de agua para bebida para más de 120 mil unidades ganaderas; suministro de agua para industrias en una importante región de clima semiárido o árido de Tucumán, Santiago, Catamarca, Córdoba y La Rioja.
Las obras principales consisten en un sistema de obras cuya finalidad es derivar alrededor de 340 hm3 de agua por año a la cuenca media del río Salí-Dulce para aprovecharla en Tucumán, Santiago del Estero, La Rioja, Catamarca y Córdoba. Este sistema está compuesto por obras de captación, de conducción y de regulación en ruta.

* Captación superficial:
Se prevé captar unos 260 hm3/año de agua a través de un sistema de galerías de 12 km de longitud, a una profundidad media de 7 metros aproximadamente, en las márgenes de los ríos Gastona y Medina, al este de la Ruta 38.
En la segunda etapa de prevé la construcción de una presa de embalse, agua abajo de la unión de los ríos Cañas y Cochuna, en las inmediaciones del actual azud derivador de Villa Lola, a unos 6 km al oeste de la localidad de Alpachiri. Esta presa tendrá como finalidad primaria regular el régimen hidrológico del río Medina para abastecer las necesidades de agua en la provincia de Tucumán y derivar los excedentes hacia el Canal Federal, insertándose en el aprovechamiento integral de los ríos Gastona y Medina como compensador del sistema Potrero del Clavillo, la obra que en futuro debería convertirse en la cabecera de este sistema.
La presa Villa Lola creará un embalse de alrededor de 65 hm3 de capacidad total, con 80 metros de altura, y será del tipo de gravedad maciza de hormigón compactado a rodillo.
Desde esta presa partirá un canal que abastecerá a las diversas redes existentes, sobre ambas márgenes del río Medina, y posteriormente al Canal Federal. Asimismo, el embalse Villa Lola proporcionará agua para uso humano, ganadero e industrial, aumentará la garantía de riego en las 9800 ha actualmente concesionadas en Tucumán, de las cuales se riegan actualmente unas 4000 ha, y permitirá derivar excedentes de 140 hm3/año, entre los meses de enero a mayo, al Canal Federal.

* Obras de conducción:
Las aguas captadas serán conducidas por el sur y sudeste tucumano hacia las zonas semiáridas y áridas del oeste de Santiago del Estero, sudeste de Catamarca, noroeste de Córdoba y noroeste de La Rioja, donde la carencia de agua es muy marcada durante todo el año.
* Obra de regulación en ruta:
La base a los primeros estudios que se realizaron, quedó demostrada la necesidad de que el Canal Federal cuente con suficiente capacidad de regulación para permitir almacenar el excedente de agua superficial captada en épocas de abundantes lluvias y entregarla cuando las demandas de riego así lo requieran.

ASPECTOS ECONOMICOS

* Agua potable: La provisión de agua potable depende de las precipitaciones locales, lo que se refleja en la costumbre de acumular agua superficial en reservorios y represas.
Todos los años el sistema entra en crisis durante la primavera y comienzo del verano, cuando las precipitaciones son escasas, lo que obliga a racionar el suministro.
Es tan dramática la escasez de agua que en algunos sectores las dotaciones no alcanzan a satisfacer más que el 25% de la dotación mínima que establece la Organización Mundial de la Salud.
Los beneficios de la provisión de agua potable se traducirán en menores costos para el estado y los particulares en materia de medicina asistencial, subsidios por incapacidad, prevención de enfermedades epidémicas, etcétera. También se producirá la reducción de los costos unitarios, en términos reales, del servicio de agua potable y la eliminación de fallas del sistema, tanto para la población urbana como rural. Asimismo se debe tener en cuenta que el proyecto aportará volúmenes hídricos adicionales, lo que se considera como un impacto social que se traducirá en el mejoramiento de las condiciones de vida de las poblaciones.

* Agua para riego:
El desarrollo de las áreas de riego representa un importante efecto económico derivado del Canal Federal. Las condiciones de aridez o semiaridez que presenta el área de influencia del proyecto hace inviable cualquier actividad agrícola, mientras que el riego a través del Canal Federal posibilitará la expansión de las actividades agropecuarias de las provincias particulares.

* Agua para ganado:
Dado que la provisión de agua es una de las numerosas variables restrictivas que se presentan para la producción ganadera, el suministro posibilitará la concreción de un proceso de cambio, pasando de la falta de manejo y control de rodeos y pasturas a la incorporación de moderna tecnología.

ALGUNAS CONSIDERACIONES ADICIONALES

Hay una importante cantidad de acciones complementarias en el protyecto Canal Federal, algunas de las cuales se encuentran en estudio, en proyecto o en ejecución.
Ellas son:
* Relevamiento de información disponible sobre contaminación por efluentes, de las fuentes hídricas, del suelo y del aire.
* Implementación de una red de muestreo sistemático de agua de canales, pozos y perforaciones para análisis físico-químicos y bacteriológicos, incluyendo metales pesados.
* Incrementar la capacidad de almacenaje para el aprovechamiento de las aguas en cuenca alta y media, debiéndose prever obras como Potrero del Clavillo y El Sauzal.
* Un estudio profundo de la tendencia de la tierra, con énfasis en la calidad de los títulos y en el "uso común de la tierra".
* Programas de control de salinidad y alcalinidad de suelos, en base a la ley nacional de conservación.


Fuente:
Extractado de Siglo XXI












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