Desconciertan las noticias azucareras en Tucumán. ¿Por qué razón? La primera sorpresa surge -luego del informe de la Estación Experimental- que el área cañera volvió a incrementarse respecto a 2014 en 6.120 has. En 2013 había alcanzado el récord histórico absoluto con 278.280 has. cosechables, o sea que podría haber existido una cantidad mayor de muy bajos rindes. Luego el área descendió un 4,6% y volvió a subir para la zafra actual. A partir de 2013 trajo una crisis de sobre producción con nefastas consecuencias en los precios del azúcar mercado interno. Ese contexto sigue encuadrado dentro de una baja constante en los precios del mercado mundial, unido a una producción estancada del Bioetanol combustible. Aquellas circunstancias hacen poco atractivo el negocio de exportación. Para 2015 se detectaron 271.320 has. cosechables y que podría traer aparejada una mayor producción por el estado de los cañaverales. ¿Entonces qué sentido tiene aumentar el área cañera frente a una crisis como la comentada y que afecta a la comercialización? Los precios internacionales del crudo no ayudan con valores equivalentes de $2,43 por Kg en vagón ingenio, a lo que habría en descontar un 30% en gastos de fletes, puertos, etc. El azúcar blanco en el mercado internacional también sigue una línea en baja hacia U$S 0,35 por Kg. Frente a ese panorama se tornan imprescindibles políticas de Estado que ayuden a descomprimir la situación, con estímulos fiscales u otras figuras como hace cualquier país en circunstancias similares para favorecer la exportación. Para Tucumán es muy importante porque es el principal producto provincial que hace al Valor Agregado Agrícola e Industrial. Estas crisis recurrentes siempre tienen un mismo origen. No se equilibra la producción con el consumo y los excesos encuentran obstáculos en sus destinos. Esto viene ocurriendo desde la primera crisis en 1912, es decir que en 100 años no se aprendió nada. En lo referente al Bioetanol las producciones de 2013 y 2014 fueron casi idénticas con 305.000 metros cúbicos en un caso y 297.298 metros cúbicos en el otro. De ello, Tucumán hizo 164.226 metros cúbicos, ósea 55,23% del total que equivaldrían teóricamente a 270.000 Tn de azúcar blanco. Pero debemos llamar la atención que hasta ahora todo el alcohol producido proviene de melaza y no de la fermentación de azúcar. Por eso enfatizo con el término teórico.
El aumento solicitado del 2% en la mezcla significaría unos 144.000 metros cúbicos de alcohol para distribuir en 3 provincias azucareras más la industria del maíz que tiene una capacidad ociosa del 17% y capacidad instalada de 541.000 metros cúbicos. El aumento citado genera fuertes resistencias en especial de YPF. Esto va a requerir una decisión política de alto nivel. Existen otros argumentos para aumentar el porcentaje de mezcla como ser que en 2013-2014 nuestro país importó 460.000 metros cúbicos de naftas por valor de 381.000.000 de dólares. Frente a ésto no estaría mal que pensemos en una mezcla del 15% como fuera con el plan Alconafta. Pero eso quedará para el próximo gobierno. La molienda de este año puede estar cerca de las 16.000.000 de toneladas netas y con la capacidad de molienda actual serán necesarios 150 días mínimos de zafra. El desarrollo de la última quincena puede ser crítico desde el punto de vista económico. Uno de los problemas de fondo es que no se cuenta con estadísticas serias y confiables para conocer cuánto es el verdadero stock de azúcar que tiene el país y/o Tucumán. De allí que haya mucha disparidad de datos al efectuar un balance nacional entre producción, consumo y reservas. ¿Cuál es el saldo exportable aún descontando el equivalente en alcohol?.
Por último vale destacar los valores del mercado mundial que tienen una gran paridad entre producción y consumo lo cual torna difícil que los precios internacionales se muevan en alza. Al contrario los cimbronazos acurren cuando el déficit supera las 5.000.000 de toneladas como fuera en 2005 y luego en 2009-2010.
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