La explotación ganadera bajo sus diferentes formas: carne, leche o cria, con pasturas coasociadas implantadas, imprime un carácter delicado a la hora del análisis de la recuperación o reposición de nutrientes exportados como carne o leche. Básicamente, “la alimentación del ganado en base a pasturas coasociadas (leguminosas-gramíneas) produce una exportación de nutrientes en mayores cantidades que la cosecha de granos”. El próximo análisis revela lo cuidadoso que se debe ser a la hora de las decisiones productivas. Veamos: una soja que rinde 3000 kg exporta 180 kg de nitrógeno y 18 kg de fósforo; un trigo de 3000 kg exporta 66 kg de nitrógeno, 10 kg de fósforo y 10 kg de potasio, un maní de 1500 kg de rendimiento exporta 75 kg de nitrógeno, 5.5 kg de fósforo y 11 kg de potasio. En el caso de pasturas coasociadas considerando un cultivo con alfalfa, festuca, cebadilla y triticale que rinde a los 210 dias de implantada: 13.7 Tn/Ha (5.6 Tn de alfalfa y 8.1 de gramíneas), al ser comida se estarían exportando (vía ganado) 383 kg de nitrógeno, 34 kg de fósforo y 570 kg de potasio. Estos valores resultan después de considerar la reposición de nutrientes por materia fecal y orina, exceptuando el potasio (no se tienen datos).
Si comparamos ambos tipos de explotación, veremos que el sistema requiere una alta atención a la exportación de nutrientes para consumo animal. La bibliografía disponible que ilustra el tema hace referencia preferencial al fósforo en explotaciones de alta producción. Aún asi, el nitrógeno no deja de ser un elemento a considerar con atención ya que las plantas gramineas se llevan 187 Kg /Ha del total y aquí no hay recuperación por fijación simbiótica de nitrógeno como en el caso de las leguminosas. Hagamos el seguimiento de los tres nutrienter: nitrógeno, fósforo y potasio.

Nutrientes básicos
El nitrógeno es aportado por la fijación biológica simbiótica en un 70% del necesario para alfalfa, pero nos quedan un déficit de 187 Kg para la nutrición de gramineas y un 30% restante para la nutrición de la leguminosa (alfalfa). En Gramíneas a través del proceso de fijación no simbiótica de nitrógeno, se podrían asegurar un 20% del total (37 Kg) . De este cálculo aproximado se deduce que hay 209 Kg de nitrógeno que deberán ser aportados por el suelo o via fertilización para neutralizar las necesidades
El fósforo; si bien se exportan 37 Kg de este nutriente para la producción de las 13.7 Tn de forraje coasociado y que podrían recuperarse por una simple fertilización queda claro que el aspecto económico nos conduce a eficientizar su uso. El fósforo es un nutriente que para considerarlo efectivamente hay que conocer su reserva natural en el suelo. Los análisis de provisión de datos casi siempre están referidos al fósforo soluble en los primeros 20 cm del suelo agrícola. Si bien esta determinación es útil, no deja de ser menos interesante conocer la reserva del fósforo total (soluble más insoluble) por lo menos hasta los 60 cm de profundidad debido a que existen datos y en no pocos suelos del pais incluido los del NOA que son verdaderas minas de fósforo.
La pregunta es: ¿cómo podemos aprovechar esa riqueza natural del suelo?. Desde el año 1988 se usan en el país Biofertilizantes combinados a base de rizobios y micorrizas con la función no solo de fijar nitrógeno sino también de abastecer de fósforo al cultivo, este biosistema perfecciona la asimilación de nitrógeno y fósforo al mismo tiempo porque los microorganismos responsables son simbióticos. Las micorrizas tienen la capacidad de extraer fósforo de la profundidad el suelo y llevarlos a la planta como asi también aumentar el pool de fósforo en la superficio, esta capacidad de asimilación y traslocación es debido al desarrollo de un micelio capaz de explorar una amplia superficie de suelo mas allá de lo que pueden las raíces del vegetal.
Gonella y Col. en 2003 en sistemas de producción orgánica demostraron obtener un incremento significativo en la producción de materia seca aérea, peso seco de raíces y contenido de nitrógeno-fósforo y potasio en pasturas coasociadas con el uso de Biofertilizantes combinados, rhizobium-micorrizas, trabajos realizados por Rodríguez, 2004, regional sur de AAPRESID han demostrado el aumento de fósforo disponible en superficie después de 5 meses de haber cosechado un cultivo de trigo usando Biofertilizantes combinados con micorrizas.
El potasio; es un nutriente que habrá que investigarlo con mayor atención en virtud de la cantidad que se exporta en este sistema de explotación; en general podemos decir que los suelos están bien abastecidos de este nutriente a nivel sub-superficial aunque disminuye en profundidad. El contenido en forraje para este caso es de 201 Kg para alfalfa y 369 Kg para gramíneas, no se tienen datos de reposición por heces y orina, aún asi las cantidades exportadas son muy importantes cuestión que no ocurre en la cosecha de granos, este es un capitulo a investigar.

Conclusiones
Resumiendo criterios concluimos que:
1- Las pasturas coasociadas exportan de dos a tres veces más nitrógeno, tres a cuatro veces más de fósforo y de cincuenta a sesenta veces más de potasio que los planteos agrícolas de cosecha de granos.
2- Es indispensable la Biofertilización combinada con bacterias fijadoras de nitrógeno simbióticas o asimbióticas con micorrizas. Este biosistema favorece significativamente la nutrición nitrógenada y fósforica de las plantas especialmente en suelos ricos con fósforo insoluble por debajo del perfil agrícola.
3- El conocimiento de las reservas minerales del suelo (nitrógeno-fósforo y potasio) por debajo del horizonte agrícola (hasta los 60 cm) nos permite hacer una evaluación más exacta de la relación gasto-reposición.