El SENASA incorporó a su Laboratorio de Sanidad Vegetal equipamiento de última tecnología, para actuar como referente en los procesos de diagnóstico de la bacteria causante del Huanglongbing (HLB), enfermedad que destruye a los cítricos.
Un equipo de PCR-RT y un homogeneizador aportarán mayor agilidad, exactitud, sensibilidad y fiabilidad a los análisis de ADN en muestras de material vegetal y/o del insecto vector del HLB (Diaphorina citri) que son recolectados por técnicos del Senasa en el relevamiento de todas las regiones citrícolas productivas del país.
Los nuevos equipos incorporados al Laboratorio de Sanidad Vegetal del Senasa son utilizados habitualmente en biología molecular ya que permiten la generación de una gran cantidad de copias de ADN, proceso denominado "amplificación", facilitando en este caso la detección de la bacteria que provoca el HLB. Estos equipos ofrecen además la posibilidad de realizar análisis en tiempo real, con resultados confiables y con bajas probabilidades de contaminación entre las muestras, complementando de manera eficiente los trabajos de monitoreo de montes productivos y arbolado urbano.
Equipos similares, también financiados por el Programa, fueron destinados a los laboratorios del INTA Bella Vista, Corrientes, al laboratorio central del INASE y de la Estación Experimental Agroindustrial Obispo Colombres (EEAOC) de Tucumán, demandó una inversión total de más de 1 millón de pesos aportados por el Ministerio de Agricultura de la Nación.
Dado que los síntomas visibles del Huanlongbing son difíciles de determinar a raíz de su similitud con otras afecciones o deficiencias nutricionales de los cítricos, el análisis de laboratorio es el único método confiable para confirmar la presencia de la bacteria (Candidatus Liberibacter spp) que la produce.
La bacteria del HLB ingresa en el sistema circulatorio de la planta produciendo en todos los cítricos y también de algunas ornamentales como el Mirto, trastornos nutricionales hasta causar pérdidas irrecuperables sobre la producción. Por el momento no existe cura posible contra la plaga, lo que lleva habitualmente a la erradicación de los ejemplares infectados.
Si bien Argentina no presenta registro de la enfermedad, su presencia en Brasil, a escasos kilómetros de nuestra frontera, implicó la adopción de medidas preventivas como la denuncia obligatoria ante síntomas sospechosos y la declaración de emergencia fitosanitaria, ambas establecidas por resoluciones del Senasa.
La prevención resulta así fundamental para defender la sustentabilidad de toda la cadena citrícola que, al emplear alrededor de cien mil trabajadores, resulta una actividad clave para economías regionales como la de Mesopotamia y del Noroeste del país.
El Senasa concluyó recientemente un monitoreo del ciento por ciento de las áreas de riesgo de contraer el HLB, cuyo análisis de muestreo arrojó resultados negativos de la presencia de la enfermedad. Estas tareas, a las que además se suman acciones de investigación, fiscalización, capacitación y difusión, se desarrollaron en el marco del Programa Nacional de Prevención del HLB del que participan organismos como el INTA, INASE, la EEAOC y asociaciones del sector privado como Afinoa y Cecnea.
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