Por supuesto, hubo zonas donde los daños fueron menores al promedio, y otras donde ese impacto negativo superó largamente esos promedios y terminaron generando graves pérdidas, en muchos irrecuperables por los agricultores argentinos, y en este caso particular en el Noroeste Argentino (NOA).
Si bien hacia el final del verano hubo precipitaciones que podrían haber mejorado la situación, muchos campos ya registraban daños irreversibles en algunas zonas, principalmente en los cultivos implantados de manera temprana, consideraron los analistas consultados por Revista Producción. En este caso y según distintos análisis, el clima seco de los últimos tres meses de 2022 complicó el desarrollo del cultivo en aquellos lotes que sembraron de forma temprano, mientras que, por otro lado, dificultó la implantación de los lotes tardíos.
Para tener un balance general de la situación agrícola-ganadera presente en la región de Metán y zonas aledañas, como Rosario de la Frontera, dialogamos con el agricultor y ganadero salteño Eusebio Baldoma, del establecimiento La Querencia S.S.
“Hola, gracias por consultarme. Es un gusto poder colaborar con ustedes. Sobre la situación de los campos en mi zona productiva de Metán y alrededores, te voy a hacer una reseña general”, nos respondió apenas abrimos el diálogo. A continuación, presentamos las preguntas y respuestas que nos dejó durante la conversación que mantuvimos.
En materia de granos, ¿cómo cerraron la campaña gruesa en el verano pasado; tuvieron rindes menores y menos volumen de producción; ese problema fue generalizado o hubo zonas en Salta donde el impacto fue más reducido?
Este año, por suerte, con la soja en mi campo, si bien no fue como en otros años, al menos -por suerte-, no fue tan catastrófico como en otras zonas alrededor de Metán, que fueron muy malas.
¿Cómo están con el maíz en la zona de Metán; está en crisis su desarrollo o lo lleva medianamente bien?
Por supuesto el maíz viene bien. Dentro de todo vienen bien: hay productores que ya están trillando, y otros ya terminaron esta etapa.
¿Y en cuanto a los rendimientos logrados?
Lotes sobre la Ruta 34, y de ahí y para el lado de la cadena montañosa, desde Metán y hasta Rosario de la Frontera, los rindes aproximados fueron de entre 2.000 kg y 2.500 kg, de promedio, de soja; y de maíz todavía no tenemos datos. Al menos yo no, porque aún no comencé a trillar.
Ahora, en este invierno, ¿cómo evoluciona el poroto; las plantas tienen un buen desarrollo o están enfrentando problemas?
Este año yo no hice poroto. Se que los porotos sembrados tardes están más o menos pasables por el frío y el calor, en conjunto, que se registró en febrero. Obviamente, hubo más enfermedades de hongos y bacterias que surgen por este clima tan errático y tan diferente en meses donde no suele ser así. Obviamente, se da que salgan cosas nuevas y todo afecta a la planta.
¿Puedes contarme algo sobre el sorgo?
Los sorgos, que son bastante aguantadores, sufrieron el impacto de muchas plagas, mucho pulgón…. Yo creo que al no haber tanta tecnología aplicándose en los sorgos, y el clima no ayuda, creo que se manifiestan mucho más las malezas y las plagas. Entonces, el manejo se hizo medio complicado, pero dentro de todo pudimos salir bien. Tampoco fue una catástrofe.
Ganadería
¿Qué puede contar sobre el impacto tuvo la sequía en la cría de ganado en tus campos?
Te cuento sobre la situación de los campos en Metán, Rosario de la Frontera; también tengo campos cerca de Anta. El tema de la recría la venimos sufriendo desde hace 3 o 4 años. Este invierno ha sido uno de los más duros de los últimos tiempos, porque en realidad antes lo solucionábamos con un poco de rollo: enrollábamos pasto o comprábamos pasto en rollo de otros campos. Pero ahora, con la sequía en este verano, no pudimos utilizar este procedimiento. Por eso, la situación en el invierno de hoy es mucho más grave que las pasadas, que también lo sufrimos, pero podíamos encontrar la forma de comprar rollos y darle de comer a nuestros planteles, o utilizando distintos tipos de picados. Pero hoy, al tener un verano tan duro como el que pasamos, los pastos no se hicieron. Yo tengo pasto implantado, y si bien llegamos en forma adecuada para esta época, pero ahora con las heladas y otros problemas, no pudimos contar con esa cantidad de pasto que teníamos anteriormente.
Por la sequía, ¿tuvieron que reordenar los programas de alimentación?
En cuanto al tema del agua, yo tengo pozo y una represa, y si bien no vengo bien, no me falta agua. Por suerte los fondos destinados con ese objeto nos permiten estar un poco mejor.