El presidente de APRONOR, Gonzalo Blasco, se declara optimista respecto de la adopción de mejores políticas para los sectores y las provincias más castigadas.
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Gonzalo Blasco, productor y presidente de APRONOR (Asociación de Productores Agrícolas y Ganaderos del Norte) analizó el presente del sector para la Revista PRODUCCIÓN Agroindustrial del NOA, sobre el potencial e importancia que representa la sanción de las normas incluidas en la denominada Ley Bases.
¿Estas hipotéticas leyes traerán beneficios al sector? ¿Cuál es la situación? * Respecto de la Ley Bases, el paquete fiscal eliminado incluía mayores Derechos de Exportación, muy perjudiciales para los productores del NOA y NEA. Pero gracias a Dios, con la participación de dirigentes del campo, logramos que se eliminara ese aumento de las retenciones del paquete fiscal. * Esa propuesta no incluye cosas y temas concretos para el sector agropecuario. * Casi diría que el sector agropecuario fue dejado de lado. * Somos optimistas respecto de la adopción de mejores políticas para los sectores y las provincias más castigadas. * Los productores y dirigentes agropecuarios sabemos cuál es el camino para que Tucumán y nuestro sector se desarrollen: necesitamos una sensible reducción de impuestos: tanto en los granos como en el citrus, la caña y otras actividades productivas que son muy importantes para nuestra economía. El problema es que estos recursos, los nuestros, que van a la zona central nunca vuelven. Lo cierto es que estos recursos nos generarían más desarrollo y crecimiento. Teníamos sectores muy pujantes, pero los aumentos excesivos de impuestos esos sectores están atravesando serias crisis. Por eso, necesitamos un Gobierno Nacional menos centralizado, un Gobierno con más políticas para las provincias más postergadas. Nuestros recursos se dilapidan.
¿Cómo es el vínculo que tienen con el Gobierno de Tucumán? En el caso de nuestra provincia nos enfrentamos con un aumento Impositivo: pagamos más por Sellos, por ejemplo, para compra de vehículos y máquinas agrícolas. No son incentivos para la inversión. En Argentina pagamos un 50% más por un tractor respecto de nuestros vecinos sudamericanos, y a nosotros nos graban aún más. Por eso, sostengo que el productor agropecuario necesita cambios urgentes: reducción de los impuestos para tener oxígeno para tomar más mano de obra, reforma de las Leyes Laborales, una política que trabaje fuertemente con el comercio exterior. Y en el caso de Tucumán, nuestras actividades como el azúcar (con cupo), el limón y los arándanos exportamos, pero los mercados internacionales son cada vez más competitivos, hay más jugadores y más fuertes que nosotros. Entonces, no debemos achicar la torta; al contrario, debemos agrandarla para que tengamos más recursos y más trabajo, porque hoy como estamos no podemos sostener nuestras estructuras.
¿Y el rol del Gobierno local? El discurso debe transformarse en hechos reales. Nuestro Gobierno está trabajando sobre la infraestructura vial muy dañada; también nos convocó para hablar sobre el manejo de las cuencas hídricas, y también hablamos del problema del “achaparramiento del maíz”. Pero Tucumán viene de 8 años sin trabajar. Está todo por hacer. Le damos para que pueda ir realizando obras en este contexto tan difícil. Hay un cambio.
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