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 Soja
Regresar al Sumario Julio / Agosto 2012

La soja en el NOA

De la tecnología al valor agregado

Entrevista: Ing. Agr. Luis Ernesto Vicini

Revista PRODUCCION: La soja en el NOA
Ing. Ag. Luis Ernesto Vicini
 

La Agricultura de Precisión es una herramienta valiosa para los actuales productores porque su aporte les permite contar con mejores diagnósticos y por lo tanto, mejorar sus sistemas de siembra y cosecha con información precisa.
Entendida como la aplicación de tecnologías para manejar la variabilidad espacio-temporal a la producción rural, se puede comparar su utilidad como las radiografías, tomografía computada o el análisis molecular de alta complejidad tiene para la medicina para diagnosticar y actuar en consecuencia. Así, el hombre de campo, con ayuda de GPS, maquinarias y software, puede medir y aprovechar el ambiente agropecuario con exactitud, hacer diagnósticos, producciones, correcciones, control, mejoras, seguimiento y trazabilidad desde el campo a las góndolas.
Y los cultivos de granos fueron los primeros en usar estas herramientas siendo uno de sus máximos impulsores en Tucumán el ingeniero agrónomo Luis Ernesto Vicini, técnico de la Estación Experimental del INTA Famaillá, veintiséis años "extensionista" Agrícola en la Agencia de Extensión Rural Banda del Río Salí y desde 2004, Referente de los Proyectos Precop y Agricultura de Precisión del INTA, Centro Regional Tucumán-Santiago del Estero, Argentina.
En diálogo con Revista PRODUCCIÓN, Vicini se refirió justamente a la importancia del uso masivo de la tecnología en el campo del Noroeste argentino, como así también en la necesidad de comenzar a darle valor agregado a la materia prima dentro de la misma región. Con vasta experiencia en el campo, también habló de la situación actual del sojero tucumano, sus virtudes, necesidades y proyección.

¿Cómo observa al sector productivo rural de la provincia?
Tucumán tiene historia de "agroindustria" ya que después de las curtiembres del Río de la Plata, la producción de Azúcar fue la agroindustria por excelencia de nuestro país, actividad iniciada en Tucumán y el NOA por los visionarios de 1870-1900. Por las bondades de su agroecología, y la ferocidad de su condición natural, Tucumán es una gran productora de biomasa. Pero al mismo tiempo tiene producciones de alto consumo de energía, tanto en caña, citrus y granos -los principales cultivos locales-; es decir, el balance energético de las principales producciones agrícolas es deficitario. Por eso, es importante una reconversión urgente para llegar a ecuaciones de oferta y demanda energética en la producción agrícola y en los procesos agroindustriales cercanos a cero; es decir, sin pérdidas ni ganancias, y a utilizar la inmensa cantidad de productos y subproductos en cogeneradores de energía. En Tucumán tenemos, entre otras cosas, la oportunidad de producir energía limpia y renovable; como un nexo hasta que lleguen al uso masivo otros tipos de energía, como la eólica, solar, la del hidrógeno, de las mareas, etcétera, y el hombre, los hogares y la industria misma, se adapten a ellas.

En ese sentido, para usted ¿es necesario agregar valor agregado a la producción primaria?
Es imperioso agregar valor a las producciones locales, puesto que no se puede seguir produciendo en la provincia ni la región, sin agregar valor a esas mismas producciones. No pueden salir de la Región NOA granos u otros productos sin algún tipo de elaboración, y esto también vale para los vacunos, la ganadería, pollos, aves en general, cerdos y lácteos. En estos emprendimientos debe participar el productor y todos los actores que componen los distintos sectores agroindustrial ya que ésto mejora la calidad de comunidades como el nivel de vida general de sus pobladores.



¿Qué papel juega la tecnología en el campo?
Desde 2001 en adelante los avances en tecnologías de la comunicación, la informática, sensores, genética (animal y vegetal), biotecnología, nutracéuticos, nano-ciencias y nanotecnología, unido a la eficiencia de la maquinaria, robótica y la gestión empresarial, vienen marcando un horizonte de esperanza aparentemente sin límites para producir con mayor inocuidad y mejora en el medio ambiente. Hay que pensar que el productor agropecuario produce alimentos que serán demandados por los mercados al menor precio posible, con la mayor calidad e inocuos para la salud humana y el medio ambiente. Hay que pensar que ya es muy tosco producir trigo, soja, maíz, carne sin valor agregado; hoy se habla en términos de moléculas específicas; así el azúcar es sacarosa, un polisacárido complejo y etanol, un alcohol; del limón, aceites esenciales para cosmética y fármacos; del arroz y maíz, la zeina (proteína de estos cultivos); de la soja, harinas, aceites y lecitinas; todos compuestos o moléculas específicas que demandará la Agroindustria; los productores van a ser productores de moléculas específicas que les demande la Agroindustria; esa es la verdadera Revolución; también se puede introducir un gen en las vacas Jersey, y ordenarles la producción de somatotrofina en la leche, una hormona de crecimiento indispensable para los niños, cuando toman esa leche de esas vacas de esos tambos y este es el nuevo desafío del papel del agro en los nutracéuticos en los fármacos, biofármacos y mil posibilidades mas que se presentan. Es mucho lo que resta por hacer e impresionante el desafío.

¿Cómo ve el desenvolvimiento actual del productor sojero de Tucumán? ¿Es eficiente, se ha tecnificado, invierte en el campo, busca superarse permanentemente...?
El Productor Tucumano es un buen productor de soja; puede resumirse su evolución en 3 ó 4 etapas, la de 1965-70, el inicio, donde la soja tucumana no marcaba en las estadísticas oficiales de la Bolsa de Cereales o de la antigua SAGPyA porque se cultivaban menos de 10.000 hectáreas y hasta 1980 incorporación de tierras por medio del desmonte, con ampliación de frontera agropecuaria en todas las Provincias del NOA, luego 1980-90 conocimiento "cabal" del cultivo de soja, asistido por instituciones como la EEAOC y el INTA, entre otras y la actividad privada; y siempre que tuvo relación conveniente insumo-producto, es decir que quedó atrás la campaña/cosecha, con "resto" importante invirtió, lo que ocurrió es que la economía nuestra ha tenido altibajos constantes; y a partir de 2000, después de la crisis de 2001, comenzó una etapa de incorporación de alta tecnología en maquinarias, semillas, conocimientos, mejoras en las ventas y la gestión, y comienzo de incorporación de agricultura de precisión como broche de oro a la ya incorporada en 1990, Siembra Directa.

Hacer soja en Tucumán -y el país- ¿se ha encarecido en los últimos años? ¿Los productores debieron reducir márgenes de ganancias o evitar algunos gastos a la hora de producir?
Pienso que sí, porque todavía existe un incremento en los costos de producción y un aplanamiento de los ingresos que genera hacer granos; independiente de condiciones extraordinarias como problemas climáticos (sequía).

El tema de los fletes sigue siendo una limitante para los productores del NOA ¿Cree que ese tema afecta la posibilidad de lograr una mayor producción de otros granos gruesos, o se puede pensar que no se hace más sorgo, o maíz por una cuestión de falta de tierras disponibles?
La producción de soja está desbalanceada en nuestro país en cuanto a rotación, (agregado de cultivos alternativos), o pasturas en un mismo lote y continúa con tendencia de monocultivo, cuya práctica, a la larga, pone en riesgo todo el sistema productivo. Por tamaño o extensión, ya que hablamos de campos de mayor superficie que los de otras regiones, y por los subproductos que quedan, podría integrarse con producciones pecuarias o de granja en diversa escala y a medida que las condiciones de marginalidad de las zonas en cuanto a la variación de precipitaciones lo exijan. De todos modos el flete es un factor que históricamente tiene el productor de Tucumán y de otras regiones distantes, justamente por las distancias hacia los puertos y grandes mercados de consumo. Y mucho mas, impactan en cultivos como sorgo, entre otros, por lo que se exige transformarlos en carne o localmente en otros productos para agregar valor.

¿Cómo hace un productor del interior del país -lejano a los puertos- para equipararse al productor de la Pampa Húmeda teniendo en contra la lejanía a los puertos, altos impuestos, superposición de tributos (nacionales, provinciales y comunales) fletes caros, retenciones?
El productor de nuestra zona, respecto a los de la zona agrícola núcleo o central, tiene en contra la variabilidad de precipitaciones, una menor calidad relativa de suelos, y las distancias. Para ésto hay que dar estabilidad a las explotaciones, con inversiones adecuadas al ambiente productivo que se disponga y agregado de valor para minimizar fletes, y apropiarse de la renta que se llevan otros sectores al productor. Hay que apoyar los proyectos que vinculen el Este-Oeste (Brasil-Chile) y la salida al Océano Pacífico con la ventaja que eso representa para llevar nuestras producciones a países del Asia-Pacífico y fundamentalmente, el agregado de valor local para disminuir el impacto negativo del flete. Las acopiadoras y cooperativas locales, deberían ser empresas de transformación y agregado de valor con participación accionaria del productor para luego transportar productos elaborados o semielaborados donde la influencia del flete sería muchísimo menor. En cuanto la superposición de tributos, lo importante es bajar las alícuotas y gravar ganancias, patrimonio u otros aspectos, cambiando los que perjudican directamente la producción y premiando a la inversión.

Cada año la soja le quita terreno al maíz y al sorgo y hasta hay campos donde se hace soja sobre soja. ¿Tiene algún techo la producción de esta oleaginosa en el país o todo depende de la demanda y los mercados?
La soja puede tener la expansión, que las tierras y el clima le permitan desarrollarse como cultivo rentable; pero hacer soja exclusivamente, es una práctica no recomendada. Que le quite terrenos a otras producciones es debido a que no se pueden hacer programaciones adecuadas del uso del potencial de las tierras y encadenar rotaciones de cultivos, fundamentalmente por cuestiones de rentabilidad comparada entre cultivos.

¿El productor sojero siente que el Estado lo apoya o cree que es al revés, que el Estado se apoya en el sojero?
Mire, el Estado debe garantizar un mercado, no paralizarlo como es el caso del trigo, debe aplicar retenciones pero no asfixiar, debe mantener una economía sana sin inflación, para que el incremento de costos no devore el margen y debe proveer infraestructura, mas en el caso de nuestro país, tan amplio y con distancias enormes a los mercados.

Revista PRODUCCION: La soja en el NOA
 
Por Fabián Seidán

Portada de la Edición correspondiente a esta nota Esta nota fue publicada en las páginas Nº 32, 33 y 34 de la edición digital de la revista de Julio / Agosto 2012.
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