El Ingeniero Agrónomo de la División Frutihorticultura del INTA Famaillá, Guillermo Torres Leal, participó como disertante invitado en la 32º Conferencia Anual sobre Control de Poscosecha de Citrus, que fuera organizada por la Universidad de California, Estados Unidos, en la localidad de Santa Bárbara. En la oportunidad, el técnico concluyó que los resultados de trabajos realizados en Tucumán en materia de sanidad de la fruta y postcosecha, fueron llevados a terreno para la aplicación de los productores y empacadores citrícolas del Noroeste argentino, por lo tanto "la producción de limón de Tucumán se caracteriza por producir una fruta de alta calidad, reconocida en los mercados mundiales, por lo que queda claro que su penetración en nuevos mercados se encuentra limitada por las barreras paraarancelarias de los países productores de fruta cítrica del hemisferio norte".
Torres Leal recordó que "el INTA sigue trabajando para lograr la mayor eficiencia en la producción local y nacional de limones", y eso genera una posibilidad mayor al ingreso de la fruta cítrica al mercado estadounidense.
Y es que durante el viaje de la comitiva oficial a EEUU que presidió la titular del Poder Ejecutivo, Cristina Fernández de Kirchner, el gobernador José Alperovich y algunos de sus ministros que la acompañaron, aprovecharon para reunirse con autoridades sanitarias de Estados Unidos. En los encuentros, se acordó la elaboración de un nuevo protocolo para el reingreso de la fruta a los EEUU.
En las reuniones con los funcionarios norteamericanos se planteó la necesidad de que EEUU fije reglas claras, ya que a principio de año se conoció que el Aphis (organismo sanitario norteamericano) planteó nuevas exigencias que tornaban más difícil el ingreso del limón tucumano a dicho país. Entre las nuevas demandas, se destacaban registros de todas las unidades productoras, monitoreos con análisis de laboratorio de todas las unidades antes del inicio de la cosecha, monitoreo de todas las plantas que muestren síntomas de enfermedades tales como CVC (Clorosis Variegada de los Citrus), recolección de vectores de esa enfermedad para determinar si contienen la bacteria, y exportar a estados que no sean productores de cítricos.
Por eso viene bien resaltar que Torres Leal, por su parte, y ante los profesionales de la Universidad de California (Campus Riverside y Davis), la Universidad de Florida, el Departamento de Agricultura de Los Estados Unidos, más el Comité de Investigación de Cítricos y representantes de empresas privadas y de servicios norteamericanas, les presentó la conferencia "Investigaciones sobre control de enfermedades de poscosecha conducidas por el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) Famaillá, Tucumán, Argentina".
En la misma señaló que nuestro país, Argentina, es hoy el principal productor y exportador mundial de productos procesados de limón, donde en la provincia de Tucumán se genera el 90% de la producción del país. En ese contexto, el técnico del INTA expuso las líneas de trabajo que está desarrollando el organismo tecnológico en la Provincia.
En este sentido, planteó que los factores que influyen en las pérdidas de postcosecha son: el área de producción cítrica, la variedad y edad de la planta, las condiciones climáticas durante el desarrollo de la producción y la cosecha, los niveles de daño de la fruta durante la cosecha, la efectividad de los tratamientos fungicidas y las condiciones ambientales de postcosecha.
"Desde el año 1990, la Argentina, a través del INTA, viene trabajando en el control de las enfermedades de postcosecha de frutas cítricas presentes en el NOA (Salta, Jujuy y Tucumán) como ser: Penicillium digitatum (moho verde), Penicillium italicum (moho azul), Penicillium ulainse (moho barboso), Geotrichum candidum (podredumbre amarga), Pthitophthora parasítica - P. citrophthora (podredumbre marrón), Phomopsis citri (podredumbre peduncular).
Actualmente, las principales líneas de investigación sobre enfermedades de postcosecha que lleva adelante el INTA Famaillá son:
1). Detección de Cepas resistentes de P. digitatum Sacc. a fungicidas de postcosecha: monitoreo de cepas resistentes de P. digitatum en quintas y plantas de empaque, conservación en frío y detección de puntos críticos de infección. Tests de sensibilidad de P. digitatum a fungicidas de postcosecha.
2). Evaluación de fungicidas como nuevas alternativas potenciales de control de cepas resistentes: pruebas in vitro, in vivo, ensayos en planta de empaque. Los Fungicidas de postcosecha ensayados fueron Pyrimethanil, Pyrimethanil + imazalil y Azoxystrobin (control de resistencia).
3). Integración de estrategias para disminuir la resistencia de los patógenos a los fungicidas de postcosecha:
a- Monitoreo de cepas resistentes en quinta y planta de empaque y determinación de puntos críticos de infección;
b- Cosecha cuidadosa, evitando heridas y golpes en la fruta;
c- Evitar el desarrollo de infecciones latentes;
d- Limpieza y desinfección de los elementos de cosecha;
e- Alternancia en el uso de fungicidas de diferentes modos de acción;
f- Sistemas de aplicación eficiente;
g- Análisis de residuos de fungicidas en frutas;
h- Uso de fungicidas en las dosis recomendadas;
i- Tratamientos alternativos a los fungicidas.
4). Control biológico: los biocontroladores utilizados en ensayos fueron Insibiox, Bacterias de Acido Láctico, Bacillus y levaduras, que tuvieron un control parcial de P. digitatum.
5). Manejo integrado de enfermedades de postcosecha de citrus. Los factores recomendados son:
a- Factores de campo que contribuyen a la susceptibilidad (condiciones ambientales, prácticas culturales y manejo de cosecha);
b- Métodos predictivos de riesgo (recolección y análisis de datos meteorológicos, muestreo de fruta previo a cosecha, identificación de patógenos en laboratorio y recomendaciones de manejo);
c- Control de fruta y conservación (cosecha cuidadosa, tratamientos de precosecha, tratamientos de postcosecha y conservación en frío);
d- Normas de manejo y tratamientos alternativos al control químico (poda de ramas secas en la plantación, supresión de inóculo removiendo la fruta caída y dañada de la plantación, desinfección de la planta de empaque y los elementos de cosecha, manejo eficiente del riego, cosecha cuidadosa, uso de bicarbonato de sodio, uso de biocontroladores y conservación en frío).
Por otra parte, enumeró los factores que inciden en las pérdidas de postcosecha producidas por enfermedades:
1). Área de producción: las enfermedades están determinadas por las condiciones climáticas. En las áreas subtropicales, con alto nivel de lluvias, predominan enfermedades cuya infección se inicia en las plantaciones, en comparación con clima mediterráneo. Entre ellas, se pueden destacar: Phytophthora citrophtora y parasitica (Podredumbre marrón), Phomopsis citri (Podredumbre peduncular) y Endomyces geotrichum (Podredumbre amarga).
2). Variedades: las especies cítricas tempranas como naranjas Navel y Hamlin, que deben recibir tratamientos de desverdecimiento, presentan mayor podredumbre peduncular que las intermedias y tardías, que no reciben este tratamiento.
3). Condiciones climáticas durante el desarrollo de la fruta: determinan sus características y actúan como barreras naturales al ingreso de enfermedades. Asimismo, influyen en el desarrollo de enfermedades cuya infección se produce en la plantación.
4). Condiciones climáticas durante la cosecha: las temperaturas previas y durante la cosecha influyen en la turgencia de la fruta y en la susceptibilidad a sufrir daños de golpes y heridas durante la misma.
5). Niveles de daño durante la cosecha (golpes y heridas): tienen una incidencia directa en el ingreso de enfermedades, que posteriormente producirán podredumbre de frutas, como Penicillium digitatum (moho verde) y P. italicum (moho azul).
6). Efectividad de los tratamientos en el control de enfermedades de postcosecha: está relacionada con el uso del fungicida adecuado, la dosis recomendada, una buena aplicación en la planta de empaque y un mínimo de residuo en fruta.
Torres Leal resaltó que la producción de limón de Tucumán produce una fruta de alta calidad, y se sigue trabajando en pos de lograr una mayor eficiencia, logro que es reconocido a nivel mundial.

A pasos firmes
Desde el Gobierno informaron que el Departamento de Sanidad de los Estados Unidos este año haría todos los controles pertinentes en la fruta tucumana, y sería el plazo en el que si no hay evidencia de enfermedades, se levantarían las prohibiciones para la fruta tucumana.
El embajador argentino en EEUU, Héctor Timerman que participó de las reuniones con el organismo sanitario norteamericano, sostuvo al respecto que existe una posibilidad de que el año que viene haya novedades sobre la reapertura del mercado para los limones, siempre y cuando se consiga el certificado del Senasa sobre fruta libre de enfermedad. "Se ha abierto una puerta, hemos dispuesto metas claras en cuanto al estudio sanitario. Luego vendrá el tiempo de pensar en los negocios. No se puede avanzar si no está lo sanitario primero arreglado", subrayó.