El presidente de la Asociación Argentina de Biocombustibles e Hidrógenos de la Argentina, Claudio Molina, estuvo nuevamente en la provincia a fin de participar de un evento organizando por la Fundación Iron, en la que expuso sobre la coyuntura y el futuro de los biocombustibles en el país y el mundo. Revista PRODUCCION participó de la charla y tras la misma habló con Molina en los siguientes términos.

Se viene un fin de año muy movido para Tucumán y la producción de alcohol...
Así es, considerando que el 1 de enero de 2010 comienza el programa establecido por las leyes 26.093 y 26.334, Tucumán es un actor principal en el mercado de etanol. Tenemos la necesidad de cortar las naftas con un 5 por ciento de etanol, la demanda que se va a generar es del orden de 282 mil metros cúbicos anuales de entrada. El programa en el primer año no está en condiciones de abastecer el total, pero una parte importante sí, va a ser progresivo el corte hasta que en 2011 se pueda cumplir con el 5 por ciento de modo que todas las naftas de la Argentinas incorpore etanol en ese porcentaje. También el diesel con biodiesel. Es un programa muy importante, hay un beneficio para toda la zona, considerando la importancia relativa que tiene el complejo o toda la cadena de valor del azúcar y el alcohol para Tucumán y la región en general, es un gran desafío se requieren muchas inversiones más de lo que se viene haciendo hasta aquí, tanto en facilidades industriales, como en todo lo que es facilidades en materia de efluentes, en planta de deshidratación, todo el tema de producción de caña, mejorar sensiblemente algunos aspectos que hacen a facilidad de productividad sobre todo teniendo en cuenta que es un programa que tiene que ir creciendo.

¿Se necesitará aumentar la producción de caña por hectárea?
Para el 5 por ciento de corte que se está manejando, con la actual producción se puede llegar, considerando el aumento enorme de productividad que ha habido. Consideremos que Tucumán en particular y toda la Argentina ha hecho un enorme esfuerzo para mejorar la variedades de los materiales de caña y eso ha impactado en la mayor productividad por hectárea. Pero el programa va a ir creciendo en porcentaje hasta alcanzar el 10 por ciento, ahí sí va a haber que incorporar o mayor producción de caña o bien otros materiales que se pueden incorporar como sorgo azucarado, remolacha azucarera de clima subtropical, maíz, cereales en general, pero éste es un programa de largo plazo. Para el corto plazo, Tucumán está en condiciones de abastecer el 5 por ciento del mercado de nafta, pero el primer año no se va a llegar con ese porcentaje y por eso se empezará a cubrir con un porcentaje menor. Será progresivo el corte.

¿Se puede comenzar así, con menos porcentaje?
Hay algunas discusiones al respecto, si se puede cortar menos, La biblioteca está dividida pero hay una decisión del Gobierno Nacional de empezar el programa. Las petroleras adecuarán el programa cortando alguna de las naftas, la Común, la Premium, se cortará por regiones, de manera de aprovechar el etanol que haya en un porcentaje equis sobre esas naftas o sobre todas las naftas de la región, hay distintas alternativas que se están barajando, lo importante es llegar a un consenso entre todos los actores. Y también hay que destacar la posibilidad de aprovechar para encaminar los históricos excedentes de caña de azúcar para derivarlos a alcohol y mejorar la rentabilidad de toda la cadena de valor de la agroindustria azucarera, generando un nuevo factor de diálogo entre los distintos actores de esta cadena que requiere incentivos muy fuertes.

A los cañeros ¿le convendrá hacer caña para azúcar o para alcohol?
Esto varía de acuerdo a los momentos, pero hoy la relación es muy positiva de acuerdo a la relación de precios establecidos por el Gobierno Nacional de 2,25 pesos el litro de etanol para el presente mes. Es un número importante como para poder empezar con toda la fuerza a cumplir con la legislación, con el alcohol.

¿Cómo está el mercado mundial del etanol?
El mercado ha tenido algunas turbulencias. La crisis internacional ha sido muy fuerte, pero se está recuperando y está mostrando algunas señales de consolidación. Estados Unidos sigue creciendo, igual Brasil, y hay otros países que se están incorporando al punto de que el año pasado hubo una producción de 74,7 millones de metros cúbicos de alcohol, 83 por ciento del total fue destinado a alcohol combustible, todo un dato.

¿Cómo ve la relación entre los petroleros y los industriales azucareros que son los que proveen la materia prima dentro del programa?
Estamos ante un nuevo paradigma, de golpe el cumplimiento de la ley obliga a incorporar biocombustibles en los combustibles fósiles, ésto de la noche a la mañana se convierte en un nuevo paradigma energético aplicado en la Argentina, por ende hay que ajustar esa relación entre los proveedores que son los productores de alcohol y los clientes que son las petroleras. Ha habido intercambio de opiniones respecto a cuestiones técnicas, que hacen a si se puede cortar a menos del 5 por ciento todas las naftas, el tema logístico que no es menor, el de la adecuación de las instalaciones para que haya capacidad de deshidratación necesaria. Consideremos que el alcohol con que se corta las naftas es anhidro y el grueso de la producción es alcohol hidratado. Hay que hacer inversiones importantes en todo el complejo, todo el tema seguridad que no es un tema menor, hay reuniones sucesivas entre todas las partes. Mire que también la Asociación de Fabricantes de Automotores de Argentina (ADEFA) participa de las reuniones que mantienen productores de alcohol, petroleros y autoridades de la Secretaría de Energía de la Nación, porque además de los temas propios de producción y distribución del etanol, estamos viendo que se debe garantizar el transporte de los biocombustibles.

Las inversiones en el sector ¿son las adecuadas o están atrasadas?
Lo ideal hubiera sido que el ritmo de las inversiones haya sido más rápido pero debemos considerar que en el medio hubo una crisis internacional muy grave que afectó el crédito. Y en un país como Argentina donde no están consolidados los mercados de capitales, el primer punto que se afecta son los créditos para proyectos de inversión.
Entonces es lógico que haya una demora, no se puede pedir otra cosa considerando por ejemplo que un símbolo del sistema financiero mundial como es el Citibank fue rescatado por el Gobierno de los Estados Unidos. Por lo tanto tenemos que tener un poco de paciencia porque desde noviembre a esta parte, en menos de un año, hubo un avance muy importante en materia de inversión. Habrá un retraso para lograr abastecer el 5 por ciento pero el programa es irreversible. El 1 de enero, después del brindis de fin de año, va a haber nafta cortada con alcohol en las estaciones de servicio de todo el país y cada compañía petrolera va a establecer su distinta política comercial, qué producto corta y en qué porcentaje lo hace, eso todavía no está resuelto, pero lo que si está resuelto es que habrá etanol incorporado en alguna de las naftas o en todas.

¿Cree que se podría repetir el fracaso del plan Alconafta?
La industria azucarera asumió un compromiso muy fuerte para producir alcohol; el Gobierno le está entregando cupos, y entonces hay que independizar la situación del mercado internacional a esta realidad. En aquella oportunidad, la falta de incentivos fiscales, fuertes sequías y los precios del azúcar buenos perjudicaron al plan Alconafta desarrollado entre 1978 y 1989. Hoy la situación del sector azucarero es delicada en lo financiero, pero no creo que se repita la historia, pese a que los altos valores del azúcar de exportación son buenos.

El precio récord del azúcar ¿no afectará los biocombustibles?
El Estado fijó un precio muy rentable para el etanol, de $ 2,25 por litro para este mes, que representa un incentivo importante para los productores. Se empieza a generar una situación sobre si la caña se deriva a producción de crudos para exportación o a alcohol. En algún momento puede ser más negocio producir azúcar que alcohol, pero con este precio estoy convencido de que es negocio producirlo.

La Secretaría de Energía de la Nación confirmó que cinco fábricas azucareras tucumanas comenzarán a producir alcohol anhidro en forma escalonada a partir de setiembre. El ingenio La Corona destilará unos 80 mil litros diarios del combustible a partir de la primera quincena. La idea de sus titulares es elevar en el corto plazo la generación de alcohol a 150 mil litros por día, con lo que superarían los 2 millones mensuales. Una cifra similar pretende generar La Trinidad, en tanto que el ingenio Santa Rosa comenzará a destilar en noviembre y Santa Bárbara y Ñuñorco harán lo propio en marzo. El ingenio La Florida ya produce 300 mil litros diarios de alcohol, todo lo cual servirá para cubrir en enero, el 2 por ciento de los combustibles fósiles que deberán ser suplantados, cifra que deberá subir al 5 por ciento en setiembre de 2010.